Coaching

El término Coach significa coche de caballos, es decir, un vehículo que nos permite viajar de un lugar a otro. El coaching está basado en objetivos y soluciones.

En mi calidad de coach le acompaño durante el proceso de asesoramiento, reforzando sus potenciales y buscando una solución para su caso personal. A veces, soy la abogada de hechos ocultados y ayudo a sacar a la luz problemas reprimidos. Otras, me convierto en la diseñadora de nuevas estrategias que ayuden a hallar una respuesta honesta.

Cualquier cambio requiere reconocer previamente el origen del agobio y reunir el valor para responsabilizarse de la situación actual. Es la única manera de construir estrategias y decisiones eficaces para aumentar el bienestar y reducir el estrés. Le ayudo a encontrar soluciones integrales que se puedan implementar en el conjunto de su vida.

Aunque los métodos del coaching procedan en su mayor parte del repertorio de métodos psicoterapéuticos, el coaching, en contraposición a la psicoterapia, no se centra en tratar las alteraciones emocionales.

El objetivo de un coaching puede ser:

  • Proporcionar claridad y seguridad para tomar decisiones profesionales
  • Planificación vital
  • Modificar patrones de estrés problemáticos
  • Reducir el miedo a exámenes o el pánico o miedo escénico
  •  Potenciación de la capacidad de aprendizaje y de rendimiento
  • Entrenamiento de competencias sociales como p.ej. la comunicación
  • Desarrollo de la personalidad

 Mi oferta:

  • Coaching de duración breve enfocado en la solución para superar un problema actual
  • Acompañamiento de larga duración para lograr procesos de modificación fundamentales o en caso de planificación vital
  • Coaching telefónico, cuando la cosa resulte urgente, porque haya que afrontar p.ej. una entrevista personal.

Estrés

Nuestro día a día se caracteriza por rápidos cambios, presión por rendir, falta o exceso de exigencias. Prácticamente nadie está a salvo de todo ello. El estrés nos perjudica, sobre todo si dura en el tiempo, tanto si lo causa una situación profesional o familiar, alguna enfermedad, padecimientos crónicos, conflictos psíquicos o pequeñas broncas constantes. Cualquier experiencia estresante nos puede agobiar incluso aunque la situación que lo desató haya pasado. Cualquier experiencia negativamente procesada – enfermedad, separación, derrota etc. – puede permanecer activa en el sistema nervioso.

Si a esto le sumamos la falta de descanso y de desconexión, puede darse una sobrecarga que nos produce un sobreesfuerzo. Cuando el cerebro no puede ordenar razonablemente el exceso de demandas e impresiones, se produce la sobrexcitación: El sistema motor se dispara y el sistema de relajación ya no aguanta. La consecuencia son palpitaciones, estrechamiento de los vasos sanguíneos y alteraciones del sueño. El sistema inmunológico se derrumba, la líbido se reduce y la vida empieza a no ilusionar.

El estrés no solo bloquea el sistema energético propio del cuerpo, sino que es responsable de gran parte de las denominadas enfermedades derivadas de la civilización (p.ej. patologías cardiovasculares).

La oferta que le ofrezco incluye apoyo a la hora de:

• Identificar su propio comportamiento ante el estrés

• Reconocer mentalidades y márgenes de maniobra

• Aprender a prevenir mejor el estrés

• Superar su propio estrés y

• Conocer el método del golpeo de los meridianos (psicoterapia energética)

 

Psicoterapia

Tanto las experiencias actuales como las que forman parte del pasado, como los conflictos emocionales y las tensiones entre personas pueden provocar sufrimiento. Puede que nos lastren a nivel consciente o inconsciente.

Muchas son las personas que están tan ocupadas pensando en el pasado o en el futuro, que el presente les pasa inadvertido.

Las personas que sufren depresión a menudo se lamentan, entristecen o culpabilizan por el pasado. Parece que se hubieran quedado atascadas en una película, en la que reviven una misma secuencia dolorosa una y otra vez, sin ser capaces de salir de ella.

Las personas que son miedosas, se comen la cabeza pensando en el futuro y se imaginan los escenarios catastróficos más variados. Cuando cavilamos y nos preocupamos, corremos el riesgo de que la ofuscación no nos deje ver las posibles soluciones que nos ofrece el presente.

El sufrimiento se incrementa si abandonamos el momento presente.

Investigo con usted transformaciones terapéuticas en la percepción, el pensamiento, los sentimientos y el comportamiento, para que recupere el bienestar. De la mano desarrollaremos estrategias que le permitirán cambiar cualquier situación deprimente, agobiante o penosa. El proceso terapéutico le permitirá vivir de manera más auténtica y plena. Esta es la base para llegar a disfrutar de la vida con mayor alegría, amor y humor.

Le ofrezco ayuda en los siguientes temas:

  • Alteraciones depresivas/depresiones
  • Alteraciones motoras
  • Miedos
  • Dependencias
  • Afrontar separaciones o duelos
  • Afrontar deudas y manejar el dinero
  • Agotamiento, patrones de estrés disfuncionales y peligro de sufrir el síndrome de burnout (quemado)
  • Falta de orientación y sinsentido vital
  • Procesos para el autodesarrollo